Como ya habrás visto, nuestro titular no deja lugar a dudas: la ITV para el coche eléctrico es obligatoria. El cometido de esta inspección técnica es corroborar que cada vehículo está en perfecto estado de revista y que puede circular por las carreteras españolas sin suponer un peligro, por lo que el tipo de motor que pueda equipar un automóvil no lo exime de pasar por este trámite.
Cómo es la ITV de un coche eléctrico
Hasta que se decida lo contrario, no existe un protocolo específico para coches eléctricos a la hora de pasar la ITV, ni para un coche híbrido. Es decir, los automóviles de estas características deben pasar los mismos tests que un coche con motor de combustión interna salvo dos excepciones:
- La prueba de emisión de gases contaminantes.
- La prueba de contaminación acústica.
El funcionamiento de los coches eléctricos no produce emisiones de gases de efecto invernadero, por lo que no tendría sentido realizar este test. Además, cuando se mueven son muy silenciosos, por lo que tampoco es necesario medir los niveles de ruido que generan.
¿Qué debo tener en cuenta para pasar la ITV de mi coche eléctrico?
Siempre es aconsejable hacer una puesta a punto a nuestro coche eléctrico antes de hacer una visita a los técnicos de la ITV, por lo que es necesario tener claro cuáles serán los puntos de examen que se deben revisar porque, de no hacerlo, podrían arrojar resultados negativos:
- Estado exterior e interior del coche.
- Buen funcionamiento de los cinturones de seguridad.
- Sistemas de iluminación.
- Los frenos y la suspensión.
- La dirección.
- Estado de los neumáticos.
Además, si el vehículo cuenta con él, revisarán el sistema de eCall (llamada de emergencia automática en caso de siniestro). Por supuesto, para poder acceder a la ITV de un coche eléctrico habrá que presentar antes tanto un documento de identificación como el permiso de circulación y la tarjeta de la ITV.
Al eliminar los tests de emisión de gases y de contaminación acústica, la prueba debería durar menos que la ITV de un coche tradicional. Esto, a su vez, se deja notar en el precio de la ITV de un coche eléctrico, mucho más económica que la de los automóviles diésel o de gasolina.
Cada cuánto tiempo pasa la ITV un coche eléctrico
En este apartado no hay diferencias con la ITV de los vehículos tradicionales, más contaminantes: un coche eléctrico se rige exactamente por el mismo calendario que ellos.
- La primera ITV de un coche eléctrico debe pasarse transcurridos cuatro años desde su matriculación.
- Desde ese momento, y hasta los 10 años, la inspección técnica de vehículos de un coche eléctrico deberá realizarse cada dos años.
- A partir de ahí, el coche de propulsión eléctrica deberá pasar la ITV cada año hasta el momento de su baja de la circulación.
¿Cómo ahorrar con tu coche eléctrico?
Existen distintas formas de ahorrar dinero con un coche eléctrico, y estos son algunos de los mejores consejos sobre cómo hacerlo:
- Planifica tus rutas y haz tus cargas de forma eficiente: Planificar los trayectos permite determinar qué paradas para cargar resultarán más eficaces, ahorrándonos tiempo y dinero.
- Conduce de manera eficiente: Una conducción eficiente maximizará la autonomía de cualquier coche eléctrico reduciendo sensiblemente su consumo de energía. Acelerar y frenar con suavidad o conducir a una velocidad constante hará que tengamos que recargar la batería menos a menudo.
- Contrata una tarifa de luz para coches eléctricos: Contratar una tarifa eléctrica específica para coches eléctricos como nuestra Tarifa Movilidad se traduce en un importante ahorro en la factura de la luz. Con ella conduciremos por solo 3€ a los 100 kilómetros usando exclusivamente energía 100% verde, ¡son todo ventajas!
Aplicar estos consejos nos permitirá ahorrar mucho dinero a largo plazo y, como ves, apenas altera las rutinas habituales de cualquier conductor.